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    • #Nuestras actualidades

    Ser una familia de verdad – Por Sara Noguera, de Crianza con Flow

    Actualizado el 14 noviembre 2023
    Crianza_con_flow_1 - Mustela España - 1

    Ser familia de Verdad

    Crianza con Flow es uno de los proyectos ganadores de la primera convocatoria de #ConLasFamilias, proyecto de crowdfunding impulsado por Mustela y Ulule

    Un texto escrito por Sara Noguera, una de las ganadoras de la convocatoria de proyectos, #ConLasFamilias, lanzada por Mustela y Ulule

    Formar una familia seguramente sea una de las elecciones personales más valientes que podemos tomar en nuestra vida. Y digo valiente porque en una sociedad donde prima el individualismo, querer dar y dedicar tu tiempo a educar y cuidar es algo fuera de lo común.

    Al formar una familia mucha gente te dice lo que vas a necesitar y lo que no, lo que se debe hacer y lo que ahora desaconsejan y sin quererlo te encuentras comparándote con otras familias y buceando en las redes para ver si encuentras respuesta a todas esas cosas que no sabías que te podrían preocupar.

    Podcast crianza con flow

    Me he tomado la libertad de redactar aquellas ideas sobre la crianza que considero que no debemos olvidar y nos servirán a todos los que hemos decidido ser madres y padres para que siempre las tengamos en cuenta y no nos olvidemos de lo importante:

    Todos los padres se equivocan alguna vez

    Todos nos equivocamos y aquellos padres que no se confunden, es que no lo quieren contar. Somos seres humanos con momentos mejores y momentos peores, no debemos de aspirar a ser perfectos, si no aspirar a ser reales y entender que equivocarse de vez en cuando no es estar haciéndolo mal. Nuestros hijos necesitan nuestro ejemplo en aquello que se admira socialmente, pero también necesitan ver que lloramos, que metemos la pata, que rectificamos, que nos disculpamos: en definitiva, que somos como ellos y que no hay que tener miedo a mostrarse tal y como se es.

    Todos los padres gritamos y regañamos alguna vez, porque también tenemos derecho a perder los nervios en algún momento y porque no estamos siempre preparados para gestionar nuestras emociones de forma óptima. Porque somos más que lo que se espera de nosotros, porque el cansancio, el estrés, las expectativas, los problemas… todo lo que conforma nuestra realidad nos afecta y nos puede jugar una mala pasada.

    Todos dejamos de ver la tele a nuestros hijos porque, aunque sabemos que tiene muchos beneficios no verla, también sabemos que nos va a salvar en momentos de desesperación o en situaciones puntuales y que disfrutarla de forma puntual no puede ser motivo de culpa.

    Todos damos comida “no sana” alguna vez, porque no podemos controlar lo que comen a cada momento, ni podemos luchar contra toda la sociedad que nos rodea, ni podemos vigilar todo lo que comen cuando no estamos con ellos, ni podemos condicionar nuestra existencia en prohibir y vigilar. Educamos enseñando que lo correcto es lo más habitual y para el resto también puede haber espacio sin culpa.

    Todos nos dejamos cosas en casa, porque bastante que salimos con la cabeza puesta en algunas ocasiones: pañales, comida, juegos, ropa de abrigo, mudas, todo se puede olvidar. Y no pasa nada.

    Todos tenemos dudas y nos comparamos, porque nos encantaría ser la versión perfecta para nuestros hijos y el ejemplo para los demás padres. Porque con tanta información muchas veces sentimos que no vamos a ser capaces de llegar a todo y, ciertamente, no lo vamos a conseguir.

    Todos los padres nos sentimos juzgados alguna vez tanto por nuestros actos como por nuestras decisiones, todos conocemos a alguien que lo hace todo bien y nos hace cuestionar nuestras elecciones y todos pensamos alguna vez si todo el esfuerzo que conlleva criar merecerá la pena en el futuro.

    Querido papá, querida mamá: Para, admira lo que tienes y siéntete orgulloso de todo lo que haces porque esto no va de ser perfecto, va de ser padre, que bastante difícil es muchas veces.

    Porque para ser una familia real, una familia de verdad, sólo tenemos que asumir que no tenemos nada que demostrar de puertas para fuera, que lo que pueda ver u opinar una persona de forma puntual no representa nuestra realidad y muchos menos debe condicionarla.

    Porque las familias se nutren de los aprendizajes en momentos buenos y en momentos malos y porque nuestros hijos e hijas se merecen adultos que los quieran por lo que son y no por lo que se puede esperar de ellos.

    Formar una familia es de valientes.

    Sara Noguera, Kimudi

    Más información en @kimudi_crianza

    Link crowdfunding: https://es.ulule.com/crianzaconflow/

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